¿Por qué puede gripar un motor y cómo evitarlo?
¿Por qué puede gripar un motor y cómo evitarlo?
Cuando escuchamos que el motor de nuestro coche produce un ruido metálico persistente, acompañado de pérdida de la capacidad de potencia y velocidad, es posible que se haya gripado por el sobrecalentamiento, producto del roce y la fusión de las piezas.
Pero, ¿qué hacemos para prevenir que suceda esta avería, una de las más graves y caras de reparar?
Causas del gripado del motor
Coloquialmente, se habla del gripado del motor para referirnos al bloqueo de sus componentes metálicos al fusionarse debido a temperaturas excesivas producidas en la combustión interna y la falta de lubricantes y refrigerantes.
Si hacemos un trabajo de mantenimiento constante de nuestro vehículo, es posible determinar a tiempo las señales de que el motor puede agarrotarse.
Las causas más comunes son.
- Se une el pistón con la camisa del cilindro por las altas temperaturas.
- Uso de lubricantes de baja viscosidad o aceites viejos y gastados.
- Refrigeración deficiente.
- El cigüeñal y las bielas se desequilibran y causan rozamientos y desgastes.
- La llama de combustión quema la capa protectora del lubricante entre el pistón y el cilindro.
Si la avería se ha agravado, se produce un ruido constante al conducir parecido al sonido de unas pequeñas campañas. En caso de que el motor se funda en plena carretera, debemos levantar el pie del embrague para ayudar a lubricar y disminuir la temperatura.
Medidas de prevención del gripado
Debemos ser rigurosos al cumplir los tiempos de cambio de aceite y filtro y utilizar aceites de calidad. El mando de temperatura nos ayuda a verificar el estado del motor del vehículo.
Recomendamos evitar las aceleraciones bruscas y frenazos que causan el aumento excesivo de la temperatura.
Es importante visitar al mecánico, quien debe comprobar el estado de los componentes del motor, el cilindro, el pistón, el cigüeñal y los manguitos flexibles.